En Promesas del Este ,

(Si no la han visto no lean, que les estropeo, y está la de la derecha en plan maternal, y su tío, en plan ducados sin filtro )

Un aparente defecto (formal) del guión. Afecta a la "suspension de la incredulidad". Cuando esta en el hospital ,.. le visita su agente de enlace: parece directamente un “deus ex-machina” metido con calzador para justificar el que siga tan campante por Londres , después de haber liquidado a un par de gangsters chechenios. ...Y las tensiones del caso Litvinenko, de forma sobrevenida le añaden inverosimilitud .

Sin embargo, es en realidad fallo del doblaje; y no del guión .Que nos ha escamoteado a los espectadores (Y HACE FALTA SER CAPULLO) , el acento ruso de un personaje, investigador de la escena del crimen……rasgo que queda así explicado.

Pero sin embargo, sin pistas anteriores , el personaje Vor ...era hasta entonces creíble: frío, y sin embargo entrañable…Con una calma budista que le permite sobrevivir con un ajuste perfecto a la jerarquía carcelaria y después a la mafiosa...y la libertad interior, para permitirse alguna expansión compasiva. Personalmente, mas creíble y entrañable que como infiltrado con una misión del Gobierno.

A lo que se añade, contenido en el guión, el legado del KGB en el actual FSB. Y en las descripciones de los Vori v Zakonen por los disidentes ex-presidiarios (“cuerpos sin alma”), sus complicidades con los “Órganos” de Seguridad del Estado Solzhenytsin.. “Como mínimo los criminales (comunes) no han traicionado a su país”