Das Kustengebiet, (la Marina..vamos)

La enésima estulticia llordcostanera: en crónica confusión del ser con el parecer, y firme asimiento del rabano por las hojas, en supina ignorancia de que la seda indumentaria no muda el estado simiesco y encumbrado ejemplo del antes podrida que comida. No se le ocurre otra cosa que abrir expediente de infracción al PEPRI por publicidad en la red protectora...de las obras de restauración de fachada..

De mayor quiero ser editorialista del "Frankfurt Allgemeine " del "Zurcher Zeitung" o similar; para poder discutir estos casos apelando a los principios ideológicos. Para tratar de abrirle los ojos al adversario polítcio al principio de subsidiariedad, debelar el exceso de celo intervencionista, la hostilidad al mercado y el beneficio individual y para encomiar las soluciones surgidas de la inciativa privada para apoyar el bien publico. Hablariamos de las restauraciones apoyada por fundaciones privadas, (i.E Cajamadrid) que rentabilizan parte de su acción social comunicando dichas obras desde los andamios. (Eso si, que implicando así al capital privado la Casa del Governador seguiría en pié no se habria dicho nunca)

Pero no estamos en Zurich.(ni en ningun municipio de obsesivo-compulsivos donde cada ciudadano parece llevar dentro un policia o un director de hotel) estamos en una celtíbera ínsula , en el mapa de la degradación urbana nacional ...Y lo que tenemos aquí no son impecables burgomaestres socialdemocratas, probos ordenancistas municipales, sino entremetidas comadres aguijadas por heteroliendres, prófugos de las caballerizas del cortijo .....

No toca por tanto Friedman ,(Nunquam prandium liberum) ni Ralf Dahrendorf sino el mas bronco Unamuno del prologo a "Abel Sanchez"..

En estos años que separan las dos ediciones de esta mi historia de una pasión trágica -la más trágica acaso- he sentido enconarse la lepra nacional, y en estos cerca de cinco años que he tenido que vivir fuera de mi España he sentido cómo la vieja envidia tradicional -y tradicionalista- española, la castiza, la que agrió las gracias de Quevedo y las de Larra, ha llegado a constituir una especie de partidillo político, aunque, como todo lo vergonzante e hipócrita, desmedrado; he visto a la envidia construir juntas defensivas, la he visto revolverse contra toda natural superioridad...(")


y hasta el Ortega mas ceñudo de "la rebelion de las masas"

"No les preocupa nada más que su bienestar y, al mismo tiempo, son insolidarias con las causas de ese bienestar."


Nos tememos que ningun texto de la "Educación para la Ciudadania" incluirá la envidia social entre sus unidades didacticas... el autoexamen fastidia la indulgente autoestima progre. Me encantará corregirme.