Por cierto que la franca y cordial no-beligerancia de ayer abarca (sin excepción) a cualquier infeliz "auditado/a"... pero en absoluto cubre a haole cuyos, por otra parte comprensibles, complejos de subeducación parecen compensarse en la declamación publica de ínfima prosa taurino-castiza; en la cultura "corporativa", y no de las optimas, como sucedáneo de ídem ( "marchismo" de logotipo) en la acumulación compulsiva e-rotomaníaca ; o en la ficción de matonismo juveniloide, tan unilateralmente frívolo con el connubium como extendiendo vacuas apuestas de jaque, cuyo crédito el sistema cardiopulmonar no puede cubrir después

( y arruix de la línea de tiro...que tiempo ha en esta isla debiose contratar a mediadores interculturales, que integraran, esta vez, a nuestro lumpen connacional en el mínimo ethos recíproco insular ... o lo devolvieran a origen antes de que profesara en carismas tan poco edificantes como el den Verga.)