En las recientes primarias socialistas, alguno de la peña de José Ramón Mateos le ha dado leña a José Manuel Bar por haber sido maoísta en Vigo.
Aunque este no es un velorio socialista, (y quiza no le haremos ningun favor a Bar, pero tampoco perjuicio) habría que poner la cosa en contexto.
Dada la franja de edad de Bar, no es especialmente friki haber sido maoísta.
De hecho, lo realmente freak en la generación de Bar, es ser marxista-leninista, trotsko, pensamiento gonzalo, y no saberlo, no haberse enterado..que habellos haylos, y haylas, también.
En Oriente la revolucion cultural, pudo ser el ultimo criminal experimento social de un genocida maniobrando frente a la consolidación de grupos rivales.Pero en Occidente fue el clavo ardiendo al que se agarraron muchos: esperando la cuadratura del círculo de un comunismo sin dictadura de partido. Alain Finkelkraut, André Glucksman,Henry-Levy, maoistas todos, y antiautoritarios..Y a quienes se debe buena parte de la labor realizada posteriormente desenmascarando la barbarie bolchevique: su falta de respeto por los derechos humanos. La distancia entre discurso y hechos en uno y otro sistema. Y todo ello mientras, moderados, (tecnócratas keynesianos, oportunistas, pragmáticos de uno y otro signo, democristianos y rojillos de sacristía,) todos sesteaban hablando de abandonar extremismos, de convergencia de sistemas, coexistencia pacífica, deshielo, y otras sandeces..
A toro pasado se les puede imputar su inicial ingenuidad/engreimiento intelectual a lo guardia rojo, (el tratar de tener el pastel y comérselo, recordar que desde los años 30 se había demostrado la imposibilidad conceptual de una economía socialista sin estado totalitario.. etc) pero no particularmente el trepismo partitocratico.
Por supuesto, frente a las ya superadas ideologías, y los valores abstractos, quizás anda mas preocupada (la basca de Mateos) por la efectividad, por las medidas concretas, "trabajar por el pueblo".
Formada en la concreción de los hechos, educada en el "trabajo diario de partido", amamantada en el cálido sentido de comunidad de la agrupación, la sección, o la célula. Quizá pueda achacarseles lo mismo que a Henry James:
"had a mind so fine that no idea could violate it."
Aunque este no es un velorio socialista, (y quiza no le haremos ningun favor a Bar, pero tampoco perjuicio) habría que poner la cosa en contexto.
Dada la franja de edad de Bar, no es especialmente friki haber sido maoísta.
De hecho, lo realmente freak en la generación de Bar, es ser marxista-leninista, trotsko, pensamiento gonzalo, y no saberlo, no haberse enterado..que habellos haylos, y haylas, también.
En Oriente la revolucion cultural, pudo ser el ultimo criminal experimento social de un genocida maniobrando frente a la consolidación de grupos rivales.Pero en Occidente fue el clavo ardiendo al que se agarraron muchos: esperando la cuadratura del círculo de un comunismo sin dictadura de partido. Alain Finkelkraut, André Glucksman,Henry-Levy, maoistas todos, y antiautoritarios..Y a quienes se debe buena parte de la labor realizada posteriormente desenmascarando la barbarie bolchevique: su falta de respeto por los derechos humanos. La distancia entre discurso y hechos en uno y otro sistema. Y todo ello mientras, moderados, (tecnócratas keynesianos, oportunistas, pragmáticos de uno y otro signo, democristianos y rojillos de sacristía,) todos sesteaban hablando de abandonar extremismos, de convergencia de sistemas, coexistencia pacífica, deshielo, y otras sandeces..
A toro pasado se les puede imputar su inicial ingenuidad/engreimiento intelectual a lo guardia rojo, (el tratar de tener el pastel y comérselo, recordar que desde los años 30 se había demostrado la imposibilidad conceptual de una economía socialista sin estado totalitario.. etc) pero no particularmente el trepismo partitocratico.
Por supuesto, frente a las ya superadas ideologías, y los valores abstractos, quizás anda mas preocupada (la basca de Mateos) por la efectividad, por las medidas concretas, "trabajar por el pueblo".
Formada en la concreción de los hechos, educada en el "trabajo diario de partido", amamantada en el cálido sentido de comunidad de la agrupación, la sección, o la célula. Quizá pueda achacarseles lo mismo que a Henry James:
"had a mind so fine that no idea could violate it."
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